Bien, bien bien bien, un poquito
de jazz fino y señores, nada mas. Me dijiste vuelve, te estaré esperando,
demasiados pasos ya me aleje caminando. Todo fue mejor después de aquel sueño
en el cual tu no aparecías y yo estaba sonriendo. Es algo extraño, para un títere sin cuerda,
mirando la luz, gritando ¿Quien coño abrió esta celda?. Hoy soy dueño de mis actos, el teatro ha
cerrado y no lo echo de menos tanto.
Esperando lo que venga, mas ya no cambio de bando. Hablando de otras
vidas y esta ya se me hizo eterna, pobre diablo, quiso olvidar el destino de su
camino, pero las piedras aun le recuerdan. Haz lo que tengas que hacer y por
favor no te arrepientas, tranquila y sin pensar pues dejaste atrás la tormenta.
Eran 40 conocidos como ladrones, solo uno se dedicaba a coleccionar corazones.
De la misma historia nacen distintas versiones, una la que el se calla otra la
que ella cuenta. Jamás la culpe por sus acciones, aun asi tuve que sellar esta
puerta. Sali del piso mientras quedaba dormida, sin mas calor que el de mi
prosa, el de mi rima, pero entendí una cosa por el amor de una rosa el
jardinero es servidor de mil espinas.
1 comentario:
Me gusta!!!
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