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14 marzo 2011

Yo y mis contradicciones.


Es verdad, echo de menos tu sonrisa, y debo admitirlo necesito tu felicidad para ser feliz. Es triste que la felicidad dependa de una persona. ¿Y si te falla? ¿Y si se marcha? Es como una partida de póker, si arriesgas ganas, pero tienes que jugar bien tus cartas, tienes muchas posibilidades de perder.

Dadme una razón por dar todo lo que tengo, todo en lo que creo, mi corazón a una sola persona, que el forme parte de mis decisiones, de mis alegrías, de mi momento, de mi vida, y no salir corriendo. Huir como estoy acostumbrada hacer, solo necesito una.

Todo el mundo hablar del amor, de lo bello que es vivir tu primer amor, lleno de momentos que jamás olvidaras, risas, besos tontos, besos guarros, confianza, latidos, nerviosismo, complicidad, sorpresas, romanticismo, pasión. ¿Ya nadie se acuerda de la decepción al ver que ese amor se acaba?. ¿Por qué nadie cuenta la segunda parte del amor? Esa en la que sufres por no volver a vivir esos momentos que te enamoraron, que la persona a la que entregas todo, se va, y tu mientras solo puedes llorar viendo como lo hace.

Que sería de la vida si viviésemos sin amor, sin ese sentimiento que hace que te sientas afortunada, que te sientas llena, en definitiva que te sientas viva. No imagino como seria la vida sin amor, sin el desamor que te hace valorarlo más aun.

¿Cómo conseguirían las películas emocionarnos sin amor? ¿Cómo sería la película El diario de Noa sin amor? ¿O un paseo para recordar?

Nadie dijo que la vida fuese fácil, pero el amor hace que la vida nos sea un poco más dulce. Creo que esa es mi razón para seguir creyendo en el amor, aunque no seamos almas gemelas.

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